Una máquina de limpieza por ultrasonidos en los talleres mecánicos, se ha convertidos en algo imprescindible.
Gracias al efecto de cavitación, la profundidad del acabado y la penetración son absolutas. En conjunto con su simple funcionamiento sin necesidad de mano de obra, convierten a éste método en el más usado y efectivo para dicho sector. Válvulas EGR, colectores, turbos, filtros de partículas (FAP), culatas, inyectores, catalizadores y todo tipo de componentes del despiece de un vehículo, pueden ser lavados sin necesidad de un operario, con un consumo energético bajo, y sin contaminación medioambiental.